Pals, Calella y Llafranc desde Barcelona

A primera vista

Descubre sus paisajes marítimos encantadores y los rincones llenos de historia en una sola excursión.

En esta excursión conoceremos la costa de Girona, pasando por Pals, Calella y Llafranc y bautizada desde hace 100 años como Costa Brava

Esta denominación es debida a su peculiar relieve abrupto y recortado, salpicado por pequeñas calas rodeadas de pinos y bañado por aguas cristalinas.

Su riqueza natural se manifiesta en que en buena parte de su territorio hay declarados varios espacios naturales protegidos, como son el Cap de Creus, los Aiguamolls del Empordà y la Reserva Marina de las Illes Medes.

Aparte del característico relieve de su litoral, la Costa Brava debe también su fama a sus pueblos. Los que antes eran pequeños núcleos de pescadores, con casitas de paredes blancas y calles estrechas y retorcidas, conservan aún hoy en día ese encanto único.

Esta zona ha sido a lo largo de los tiempos lugar de entrada, paso y asentamiento de diferentes culturas y civilizaciones que han ido dejando su huella hasta la actualidad, prueba de ello son los yacimientos griegos y romanos de Empúries.

Nuestra intención es enseñar en un día los lugares más representativos, emblemáticos y de belleza inigualable para dar una idea de lo que es y representa la Costa Brava. Es algo que todo aquel que visite Cataluña no puede perderse y que seguro ya no dejará indiferente a nadie.

Programa:

Nuestra salida es desde la Estación del Nord (andana 16) en Barcelona todos los viernes a las 8.30h. Recomendamos estar un cuarto de hora antes.

Tomaremos la autopista y alrededor de las 10 y cuarto llegaremos a Calella de Palafrugell, pequeño pueblo de pescadores que conserva todavía hoy la fisonomía tradicional de antes. Pueblo de gran belleza, tanto en arquitectura como en paisaje, todo él salpicado de pequeñas calas, una fusión que lo convierte todo en un marco incomparable.

Tendremos tiempo libre para visitar el pueblo, disfrutar del paisaje y hacer unas excelentes fotografías.

Alrededor de las 11 y cuarto, comenzaremos un itinerario a pie por el Camino de Ronda, que nos llevará hasta la vecina población de Llafranc. El paseo dura un cuarto de hora, es apta para todas las edades, terreno plano y nada dificultoso. Los Caminos de Ronda bordean toda la Costa Brava y antes eran utilizados para vigilar el contrabando marítimo. Actualmente gracias a ellos se pueden descubrir preciosos rincones, que de otro modo serían inaccesibles.

Llafranc es también otra pequeña, elegante y cautivadora localidad marinera, con todos los encantos propios de los pueblos de esta costa.

Hacia las 12 del mediodía llegaremos hasta Pals, localidad enclavada más hacia el interior y en la parte alta de una colina. El pueblo se encuentra integrado en casi su totalidad dentro de un impactante conjunto medieval. El recinto está coronado por una torre cilíndrica del s. XII, visible desde lejos y que se nos ofrece como una amplia terraza con inmejorables vistas panorámicas a la Costa Brava y sus alrededores.

Paseando por las calles adoquinadas de su casco urbano nos sentiremos retroceder en el tiempo. Arcos de medio punto, fachadas con ventanas ojivales, balcones de piedra, todo en perfecto estado de conservación.

Nuestra siguiente visita será en el Estartit, población marinera con importante puerto y famosa internacionalmente por ser un centro de buceo debido a que el archipiélago de las Illes Medes se encuentra a un kilómetro de su costa. Las Illes Medes son de un gran interés por la gran variedad de flora y fauna que habita en toda su área marítima, con más de 1.200 especies clasificadas. El ecosistema ha sido catalogado como la mejor reserva del Mediterráneo Occidental. Está declarado Parque Natural Nacional Protegido y ZEPIM (Zona Especialmente Protegida de importancia para el Mediterráneo).

Habrá tiempo libre para comer y dar una vuelta por la población y a las 3 nos embarcaremos en el Nautilus, barco dotado de visión submarina.

El recorrido dura 1 hora y media. Primeramente nos dirigiremos hacia las Illes bordeándolas. Las imágenes ya de por sí son espectaculares, pero además, y a través de unas cabinas sumergidas con grandes ventanales, podremos disfrutar de una visión excepcional de un fondo marino lleno de vida, como si estuviéramos buceando!

El itinerario sigue hasta los espectaculares acantilados de la Serra de Montgrí, sólo accesibles por mar, una de las zonas más vírgenes de la Costa Brava.

Per la tarda ens arribarem fins a Pals, localitat enclavada més cap a l’interior i situada a la part alta d’un turó. El poble es troba integrat en gairebé la seva totalitat dins d’un impactant conjunt medieval. El recinte està coronat per una torre cilíndrica del s. XII, visible des de lluny i que se’ns ofereix com una ampla terrassa amb immillorables vistes panoràmiques a la Costa Brava i els seus voltants. 

 Tot passejant pels carrers empedrats del seu nucli urbà ens sentirem retrocedir en el temps. Arcs de mig punt, façanes amb finestres ogivals, balcons de pedra, tot en perfecte estat de conservació. 

 A las 6 acabaremos la excursión y volveremos hacia Barcelona, donde aproximadamente llegaremos hacia las 8 de la tarde en la Estación del Norte.

*Hay que indicar el número de niños menores de 4 años en el apartado «Observaciones» de la reserva, dado ocupan asiento en el bus.